En este artículo veremos los pilares básicos de la técnica (EM) que se fundamenta en la microvida del suelo. La simbiosis que hacen algunos microbios con las plantas, las beneficia hasta el punto de que sea más difícil que alguna plaga ataque a nuestras plantas de marihuana. Y sobretodo, no olvidaremos que esta técnica se usa en países como Japón para su agricultura, con el fin de que sus vegetales no contengan trazas de fertilizantes químicos y restos de metales pesados. El sabor de los vegetales producidos con estas técnicas siempre será mejor que el producido con otros métodos (fertilizantes químicos).
Un poco de historia de la técnica EM (Microorganismos beneficiosos) y Bokashi
La palabra Bokashi proviene del japonés y su significado es el de fermentación. La fermentación ha sido utilizada por el ser humano desde sus principios, ejemplos claros pueden ser la cerveza, los yogures o los quesos. Esta ha sido durante años la encargada de aportar microbios beneficiosos a el hombre, ayudando a regular procesos básicos del cuerpo como las digestiones. Todas las culturas han sido conocedoras de los beneficios del aporte de estos fermentos, tanto en humanos como en vegetales. En mi opinión personal, la entrada de la industria en la producción de vegetales ha sido la encargada de hacer desaparecer estas técnicas milenarias, dándoles de lado con los fertilizantes químicos y la idea de mayores producciones. No descarto que usando ese tipo de fertilizantes las producciones sean mayores, lo que sí puedo asegurar es que nunca podrán competir con las realizadas con esta técnica, ya que la producción de aromas y sabores será mayor que solo con el uso de fertilizantes clásicos. En 1970 el agricultor Japones Teruo Higa descubrió que una combinación de 80 microorganismos diferentes eran capaces de influir positivamente en la descomposición de la materia orgánica, revirtiendo en un proceso beneficioso para el medio y la creación de nueva vida.
Conceptos básicos para la preparación del Lactobacillus
Los procedimientos necesarios para la preparación de la mezcla no serán de un elevado coste y en muchos casos podremos encontrar los materiales en nuestro hogar: 1- Pondremos arroz y agua libre de cloro en un bote con tapa para su posterior agitado. Con esto conseguiremos sacar todo el almidón posible del arroz. Una vez se observa el agua de color blanquecina, se cuela y se vuelve a introducir en el bote donde ha sido agitada junto al arroz anteriormente. El arroz sobrante se guarda para aprovechar en nuestro uso alimentario. 2- Poner la tapa sin apretar del todo y guardar en un armario o similar donde no pueda dar la luz (5-7 días). 3- Transcurrido ese tiempo colaremos la capa superior que se haya formado y guardaremos el suero (líquido) para seguir con el procedimiento. 4- Medimos la cantidad de agua de arroz que tenemos y añadiremos a una parte de agua de arroz fermentado 10 partes de leche y dejaremos reposar otros 5 o 7 días. 5- Pasados esos días, veremos que se ha formado una capa superior. Esta la sacaremos y podremos aprovechar para el huerto, repartiendo pequeñas cantidades para la repartición de microorganismos. Por otro lado tendremos el suero líquido en el que tendremos nuestros microbios beneficiosos, pero estos se encuentran de forma inactiva. 6- Añadir una cucharada de melaza o miel en su defecto, para mantener alimentados (activos) los microorganismos y podremos guardar en un sitio fresco y seco para su uso. 7- Para hacer uso de este, debemos mezclar una parte del suero con 20 partes de agua libre de cloro. Y ya tendremos listo nuestro EM-1. Un truco para saber si hemos realizado todo en su debido orden y no ha habido ningún fallo, es el de oler la mezcla una vez finalizamos todo el proceso. Si el olor es fuerte como a podredumbre, deberíamos desechar la mezcla ya que por algún problema sucedido la reacción la mezcla se ha contaminado por otros agentes y no se ha realizado correctamente. Si por el contrario, si el olor es a fermentación, pero suave, podremos hacer uso de esta mezcla usándola siempre con agua libre de cloro.
Beneficios de esta mezcla para las plantas de marihuana
Esta mezcla la podremos usar tanto en plantas recién germinadas o esquejes, como en plantas en crecimiento y floración, ya que con esta mezcla estaremos aportando los microbios beneficiosos que en todo momento vayan necesitando. Vemos como las plantas que están siendo tratadas con esta mezcla no son tan propensas a contraer enfermedades, ya que estos microbios se encuentran en simbiosis con nuestras plantas de marihuana, ayudándolas a enfrentarse a este tipo de adversidades. Otro factor que debemos tener en cuenta es que con el uso de microorganismos beneficiosos mejora la vida del suelo y aumenta la absorción de nutrientes. Por eso, debemos recordar añadir fertilizantes una vez por semana para no llegar al agotamiento del suelo. Una curiosidad que podemos ver con el uso de microorganismos beneficiosos es que se están consiguiendo granjas de cerdos sin molestias de olores, incluso se puede dar un aporte de estos microorganismos beneficiosos junto a la comida de nuestros animales de compañía, llegando a no producir mal olor sus defecaciones y ayudando en todo momento a su tránsito intestinal. Mas adelante hablaremos del concepto Bokashi, y de otras preparaciónes como el EM-5. Pero eso ya será en otro artículo. Hasta aquí una semana más, gracias a todos los lectores y un verde saludo. - Desde aquí quiero pedir disculpas a los lectores por un error que he tenido y espero que no os haya causado muchas molestias.
Jhonny_Pot.